Goiko Grill ¿las mejores hamburguesas de Madrid?
Goiko Grill, éste es nuestro nuevo gran descubrimiento en el panorama de las hamburguesas madrileñas: ¿son las mejores de la ciudad? No podemos decirlo porque por suerte o por desgracia nos quedan todavía unas cuantas por probar. Pero lo que podemos afirmar es que son de las mejores, son unas señoras hamburguesas que tenéis que probar. La lista es larga, y por suerte no deja de crecer, pero Goiko Grill ha entrado con ganas de conquistar a los madrileños con las suyas.

El plato fuerte de Goiko Grill, sus hamburguesas, son una verdadera delicia: 190 gramos de carne de buey picada y sazonada al momento que tiene 10 configuraciones diferentes creadas por el venezolano-vasco-madrileño Andoni Goicoechea. La Foie, la M30, la Philly, la Chipotle, la Aloha y más variedades, con la posibilidad de que si ninguna te atrae diseñes la tuya propia. Yo probé la Chipotle Burger (9,90 euros), con guacamole fresco en rústico del día y una salsa chipotle ligeramente picante de acompañamiento. El punto de la carne estaba conseguido, y la hamburguesa es casi perfecta, acompañada de sus patatas gajo y su pequeña ensalada. Si sois valientes o tenéis mucha hambre, también las hacen dobles y triples. Si no sabéis qué pedir dejad que los camareros os aconsejen.

¿Pero hay más que hamburguesas en Goiko Grill? Sí, hay más que hamburguesas. Uno se sienta y ve pasar enormes boles de ensalada lleno a rebosar y fuentes de aros de cebolla (5,50 euros) que dan para 3 o 4 personas. Hay unos teques con salsa de piquillo, una versión venezolana de los palitos de mozzarella, que son un buen entrante, aunque un poco escasos para los 7,50 euros que cuesta. Aparte hay platos de cuchillo y tenedor como el entrecot o ligeros como sus variedades de sandwiches. Postres caseros y refrescos de lata. Entre semana tienen una happy hour de 17 a 20 horas con una bebida diferente cada día. Como detalle, tienen para condimentar la salsa de moda, la Sriracha.
Goiko Grill es un pequeño local situado en la calle María de Molina 16 (Metro Gregorio Marañón). Unas 15 pequeñas mesas (dos o tres más en la calle) se juntan en un local de decoración cálida y casera. Una estética moderna e indie que podría situar su pequeño comedor en Malasaña. La clientela es fundamentalmente joven, y se puden ver jóvenes estudiantes de centros cercanos junto a ejecutivos de las grandes empresas de la zona. Españoles y extranjeros, porque se nota la presencia de las embajadas cercanas entre los visitantes. Un ambiente relajado y desenfadado que se nota y que se agradece. Con wifi.